El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) ha revisado a la baja su pronóstico de crecimiento económico para el presente año, situándolo en un modesto 0,9%.
Según Julio Velarde, presidente de la entidad monetaria, esta revisión a la baja se debe principalmente a dos factores clave: el impacto más significativo de El Niño costero y la persistente falta de confianza tanto de los consumidores como de las empresas.
«Hoy estamos enfrentando una contracción del 2%. Esto se debe en gran medida a las sequías en el sur a principios del año, pero sobre todo a los efectos de El Niño en el norte», comentó durante la presentación del Reporte de Inflación de septiembre de 2023.
Velarde señaló que este fenómeno climático ha tenido un impacto directo en la producción de alimentos, provocando un aumento en el precio de productos como el limón. Además, la industria pesquera también ha sufrido considerablemente, con una caída prevista del 27% en ese sector. «Esto afecta, obviamente, también a la manufactura no primaria, como la harina de pescado», destacó.
El presidente del BCRP subrayó que la economía peruana ha enfrentado una especie de «confinamiento» debido a estos factores, lo que ha afectado a una amplia gama de actividades económicas. Incluso las empresas que no operan en las zonas afectadas por las sequías o la pesca han tenido dificultades para vender sus productos y transportar mercancías.