La situación hídrica en Tacna es preocupante. El agua para consumo humano estimada para agotarse hacia finales de enero si no se registran lluvias suficientes en la temporada de verano. Actualmente, la represa de Paucarani es la fuente más importante, seguida de la laguna de Casiri. Donde se está realizando un dragado para obtener más agua, dada la baja en sus niveles.
El sector de Cerro Blanco alberga reservorios que se consideran como último recurso en caso de emergencia, además de fuentes más pequeñas como ríos, canales y pozos subterráneos. El Proyecto Especial Tacna (PET) gestiona el suministro de agua para la agricultura y consumo humano, y la demanda ha aumentado alarmantemente en el último mes.
Ante esta crisis, el gobierno regional está elaborando proyectos para desalinizar agua de diversas fuentes, como el mar y los ríos Maure, Sama y Pozos, para destinarla al consumo humano. Sin embargo, la formulación de estos proyectos podría llevar medio año.
El gerente del proyecto visitó Rusia para conocer experiencias con plantas desalinizadoras, donde notó que se utilizaba energía nuclear para ejecutar este tipo de tratamientos. Esto podría ser un factor a considerar en la implementación de estas tecnologías en la región.
