Carlos Serpa, abogado defensor de Alexander Uraccahua, conocido como el payaso «Zapallito», y su esposa Solange Begazo, respondió a las acusaciones de explotación infantil que han recaído sobre la pareja, quienes fueron detenidos el pasado 24 de enero en el distrito de Cerro Colorado. Según el abogado, la detención fue injusta y no se basa en pruebas sólidas, además de considerar que la familia ha sido “víctima de una campaña de difamación”.
Serpa explicó que las acusaciones de explotación infantil no están respaldadas por pruebas concretas y defendió a sus clientes, argumentando que Uraccahua es un payaso que ha trabajado de forma honesta durante años en la calle, mientras que su esposa, Solange, es una madre comprometida que siempre ha priorizado el bienestar de sus hijos. “Mi cliente es un hombre de trabajo y su esposa una madre dedicada. No hay elementos que justifiquen las acusaciones que se les han hecho”, expresó el abogado.
El representante legal también señaló que, en su opinión, la investigación del caso ha sido parcial y no ha considerado adecuadamente la versión de la familia. Aseguró que Uraccahua y Begazo han colaborado plenamente con las autoridades, proporcionando toda la información requerida para esclarecer los hechos. “Mi cliente ha cooperado en todo momento y ha entregado toda la información necesaria para demostrar su inocencia”, afirmó Serpa.
La Fiscalía continúa investigando el caso, aunque ambos padres de familia han quedado en libertad mientras se sigue con la indagación. El abogado Serpa dejó claro que su intención es demostrar la inocencia de la familia Uraccahua Begazo y exigir una reparación por los daños causados por lo que considera una detención arbitraria.
