La noche del 27 de noviembre, padres de familia del Colegio Nuestra Señora de los Dolores, ubicado en el distrito de Cerro Colorado, se congregaron en vigilia frente a la institución para exigir la anulación de una notificación de desalojo. Esta medida, que afectaría a aproximadamente 500 estudiantes, es producto de un conflicto legal sobre la titularidad de los terrenos donde funciona el colegio. El Arzobispado de Arequipa ha señalado que los terrenos en cuestión le pertenecen, lo que ha generado gran preocupación entre los padres, quienes temen que el colegio cierre sus puertas.
Ante la amenaza inminente de desalojo, los padres de familia realizaron una marcha el 28 de noviembre hasta el frontis del Arzobispado, buscando visibilizar su demanda de anular la notificación y evitar el desalojo. Emeretio Gutiérrez, presidente de la APAFA del colegio, explicó que este problema lleva años gestándose y que, además de la notificación judicial, la municipalidad no ha cobrado los arbitrios municipales, como si el colegio fuera público. Según Gutiérrez, la municipalidad invirtió en la infraestructura escolar, y la APAFA supervisó toda esta labor. Los padres temen que, con el juicio que se iniciará en enero, sus hijas queden sin acceso a un local para su educación.
Buscan una solución
La situación también ha sido tomada en cuenta por autoridades locales. La consejera y presidenta de la Comisión de Educación, Marleny Arminta, destacó que, más allá del conflicto legal sobre la propiedad de los terrenos, lo fundamental es garantizar la continuidad de la educación de las estudiantes. Arminta hizo un llamado a la sensibilidad del Arzobispado, sugiriendo que aún es posible encontrar una solución a través del diálogo. “Lo más importante es la educación. Vamos a solicitar una mesa de diálogo para que haya mayor flexibilidad y se pueda resolver antes de que termine el año escolar”, manifestó la consejera.
