La Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Arequipa logró una sentencia inmediata en contra de un taxista investigado por el delito de receptación agravada. A través de una intervención eficaz, el Ministerio Público consiguió imponer una condena al acusado, quien además deberá pagar una compensación económica a la víctima.
El proceso judicial comenzó cuando una persona se dio cuenta de que un celular, similar al que le habían robado, se estaba ofreciendo en redes sociales. La víctima, al identificar el dispositivo, contactó al vendedor y coordinó una cita en la Av. Independencia. Al informar a la Policía Nacional sobre la situación, se montó un operativo para intervenir en el encuentro.
Durante la operación, las autoridades detuvieron al acusado. Sin embargo, al verificar el celular en cuestión, se descubrió que no pertenecía a la víctima que había denunciado el robo, sino a otro agraviado, quien había reportado la pérdida del equipo en el sistema de Osiptel. Este último pudo demostrar la propiedad del celular mediante la presentación de los recibos de pago y la boleta de compra.
Restricciones
Con las pruebas recabadas, la Fiscalía presentó el caso ante el juez, quien, tras un proceso inmediato, declaró al acusado culpable del delito de receptación agravada. Como resultado, se le impuso una pena privativa de libertad de cuatro años y cuatro meses, pero con carácter suspendido por tres años. El taxista deberá cumplir varias reglas de conducta, como presentarse cada tres meses al Registro de Control Biométrico, no cambiar de residencia sin autorización judicial y abstenerse de cometer nuevos delitos.
Además, el acusado deberá pagar una reparación civil de S/ 1000 a la víctima y una multa de S/ 1200. Si no cumple con las condiciones impuestas, la pena será ejecutada y deberá cumplir la sentencia en prisión. La fiscal adjunta, Milagros Vilca Huamán, lideró las diligencias que llevaron a la pronta resolución del caso.
