Las declaraciones de Kim Jong-un señalan una postura firme con respecto a Corea del Sur, descartando cualquier posibilidad de reconciliación y subrayando una percepción de hostilidad por parte del país vecino. La idea de unificación parece distante, ya que, según Kim, Corea del Sur ha mostrado una postura de enemistad, buscando el colapso del régimen norcoreano.
Además, el líder norcoreano ha enfatizado la necesidad de un «cambio fundamental» en las relaciones con Corea del Sur. Evidenciando la percepción de que estas naciones se ven como hostiles o en un estado de conflicto.
Kim Jong-un anuncía tres satélites espías más
En cuanto a la actividad espacial, Corea del Norte ha anunciado planes para lanzar tres satélites espías adicionales en 2024, tras el éxito de su primer lanzamiento en noviembre. Este movimiento podría indicar una mayor incursión en la observación desde el espacio, utilizando satélites espías para capturar imágenes de diversas áreas, incluidas instalaciones militares.
Este impulso espacial se suma a la declaración previa de fortalecer las capacidades militares del país, incluyendo desarrollos en armamento no tripulado y guerra electrónica. Este énfasis en la preparación militar sugiere una voluntad de mantenerse alerta frente a posibles crisis nucleares y reforzar la defensa nacional.