En un operativo sorpresa realizado en el Mercado de San Camilo, en pleno centro histórico de Arequipa, autoridades del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), junto con la Policía Nacional del Perú, incautaron 110 lagartijas y dos culebras que estaban conservadas en frascos con alcohol. Un comerciante ofrecía estos animales, que forman parte de la fauna silvestre nativa, como supuestos remedios tradicionales en su puesto de venta de hierbas medicinales.
El vendedor había almacenado las lagartijas (Microlophus peruvianus) y serpientes (Tachymenis peruvianus) en grandes frascos de vidrio, listas según indicó, para usarlas en tratamientos de fisioterapia. Sin embargo, las autoridades confirmaron que no existe base científica que respalde estas prácticas, las cuales representan un riesgo tanto para la salud pública como para el equilibrio ecológico.
Especialistas de Serfor calificaron este hallazgo como un claro ejemplo de maltrato animal, al observar que entre los ejemplares incautados había desde crías hasta adultos. Esta situación evidencia no solo el desconocimiento sobre el valor ecológico de estas especies, sino también una preocupante normalización del uso de fauna silvestre con fines no comprobados médicamente.
“Este tipo de prácticas no solo son ilegales, también son peligrosas. No hay estudios que avalen su uso terapéutico. Hacemos un llamado a la ciudadanía para que no se deje engañar y denuncie estos casos”, señaló Luis Felipe Gonzáles, Administrador Técnico de Serfor en Arequipa. Asimismo, recordó que la extracción y comercialización de fauna silvestre está prohibida por ley.
Las autoridades iniciaron un Proceso Administrativo Sancionador contra el comerciante, ya que poseer y vender animales silvestres constituye una infracción muy grave, según lo establece el Decreto Supremo N.º 007-2021-MIDAGRI. La sanción podría alcanzar multas desde 10 hasta 5000 Unidades Impositivas Tributarias (UIT), dependiendo de la gravedad del caso y otros factores legales.
