El alcalde de Río Grande, Marcos Medina, ha revelado que más de 10 mil personas en su distrito están enfrentando serias dificultades con el suministro de agua. Esta situación ha generado una creciente demanda por una mayor asignación presupuestaria para finalizar una importante obra de agua, desagüe y planta de tratamiento. La obra inició en 2015 y actualmente solo ha avanzado en un 70%.
Medina expresó su preocupación, destacando que al asumir su cargo, el proyecto se encontraba sin presupuesto, a pesar que el gobierno anterior recibió dos transferencias previas. A raíz de esta situación, el Gobierno Regional solicitó un informe detallado del estado de la obra, el cual se completó en tres meses. Esto reveló que se necesitan seis millones adicionales para su conclusión.
Se espera que la comisión de presupuesto del Consejo Regional, presidida por la consejera Yesenia Choquehuanca, reevalúe el expediente y considere la asignación de fondos necesarios para concluir el proyecto.
El alcalde expresó su decepción por la gestión anterior, que no logró finalizar la obra según lo planificado. Anunció su intención de investigar posibles irregularidades en el uso de fondos públicos. Además, señaló que los gremios y asociaciones de Río Grande están preparados para organizar una marcha en protesta por esta situación. El alcalde respalda la causa de los ciudadanos afectados.