Este domingo 1 de septiembre, durante el corso melgariano, un niño de solo dos años estuvo a punto de perder la vida cuando se atoró con un objeto en la boca, bloqueando sus vías respiratorias. Los serenos encontraron al menor, identificado con las iniciales N. A. T. P., sin signos vitales y con la piel morada, mientras su madre, en un estado de desesperación, pedía ayuda en la intersección de la Av. Lima con la calle Tumbes.
Afortunadamente, en las cercanías del incidente se encontraba la ambulancia municipal de Seguridad Ciudadana, equipada y con personal altamente capacitado para manejar emergencias. La madre del niño, al percatarse de la gravedad de la situación, recibió asistencia inmediata del sereno Luis Fernando Álvarez Andrade. El trabajador constató que el menor no reaccionaba y había perdido sus signos vitales.
Álvarez Andrade, gracias a la formación continua brindada a los miembros de la municipalidad, aplicó de inmediato la maniobra de Heimlich y la Reanimación Cardiopulmonar (RCP). Durante el traslado al Hospital General, aproximadamente a la altura del óvalo de la Av. Dolores, el niño fue reanimado y expulso el objeto que había obstruido su respiración.
Una vez en el hospital, el Dr. Karla Urday diagnosticó al niño con neumonía aspirativa y lo ingresó para observación. La madre, al recibir noticias de que el pequeño había superado lo peor gracias al rápido y efectivo accionar del sereno, expresó su inmensa gratitud. Este martes 3 de septiembre, dieron de alta al niño tras una recuperación exitosa.